La idea de formar una sociedad montañera en Portugalete, empezó a tomar cuerpo en octubrede 1.952 entre un grupo de jóvenes aficionados al montañismo que se agrupabanen torno a Pablo Escudero, que luego sería nombrado el primer presidente delgrupo.
PABLO ESCUDERO: Una vez que surgió laidea de constituir una sociedad nos fuimos reuniendo bastantes veces en eltxakoli de Minuto para ir salvando las trabas que existían ante un empeño deeste tipo. Así decidimos que el nombre fuera Mendiruntz, "hacia el monte", pero la federación lo rechazó.Recuerdo que en una entrevista con Angel Sopeña me dijo que dejara Mendiruntz ypusera un nombre "español", sugiriéndome por ejemplo Serantes. Mi contestaciónfue rápida, el nombre no lo ponía yo, sino que se elegía democráticamente en elgrupo.
Nos dimos cuenta enseguida de que en 1.952 estábamos en plena época dorada de ladictadura y la represión era muy fuerte. La Federación Española de Montañismo,controlaba directamente a todas las sociedades del Estado y sólamente, segúnleemos en un anuario de aquella época, en atención a las circunstancias queconcurrían en las regiones catalana y vasco-navarra se creyó conveniente lacreación de sendas delegaciones, bajo el mando de un JEFE según la más puraortodoxia del régimen, a fín de facilitar la labor burocrática. Lascircunstancias a que hacía referencia era el número de sociedades, 54 enEuskadi, 53 en Cataluña y 27 en el resto del estado español.
Los estatutos eran fijados obligatoriamente para todas las sociedades por la DelegaciónRegional de Deportes de F.E.T. y de las J.O.N.S. y tenían claras referenciaspolíticas, como eran que los excombatientes del bando vencedor pagaran comosocios sólo media cuota, o que las mujeres no pudieran inscribirse sin haberrealizado el Servicio Social Nacional.
Pero volviendo a los problemas con el nombre del grupo, ¿Cómo se resolvieron?
PABLO ESCUDERO: Al prohibirnos Mendiruntz, optamos por el nombre de Ganerán, pero posteriormente me dícuenta de que al añadirle la terminación tz Ganerantzi ba a parar felizmente al mismo significado, en lugar de "hacia el monte","hacia la cumbre".
No obstante nos inscribimos en la federación como Ganerán,pero posteriormente empezamos a meter la tz,no sin las consiguientes protestas y líos. Recuerdo que para entregarcualquier documento aprovechábamos cuando estaba el secretario Hervías, que erauna gran persona y con más manga ancha, que nos llegó a temer pues decía quesólo le llevábamos líos.
De Madrid empezamos a recibir cartas pidiendo explicaciones de la tz, a lo cual hicimos caso omiso, hasta que se fueron cansando yolvidando del asunto. Así es como nos salimos con la nuestra.
¿Cuando se hizo la constitución oficial?
PABLO ESCUDERO: El acto fundacional se hizo en el Txakolí de Minuto, en los bajos del bar Minuto, en General Castaños,el sábado 14 de febrero de 1.953 con la asistencia de unos 50 socios.
Se constituyó la primera directiva y se ratificó el nombre y el escudo del grupo, así como ellocal social que sería en el bar Feli en la calle Santa María nº 13. El actoterminó en medio de un gran ambiente brindando con unas copas de magníficotxakoli.
La primera directiva la formaron conmigo, Tonchu Hernandez Izurrieta, de secretario, JesúsEgaña de tesorero y vocales Ismael Chico, Angel Escribano y Enrique Barco. Noestaba Felipe Monasterio, imposibilitado por causas familiares, y que ocuparíala vicepresidencia los seis años siguientes
Decíamos antes que aquella era una época dificilpara todo tipo de organizaciones, a las que se intentaba encuadrardentro de la ideología del sistema vencedor en la contienda civil. Ennuestros archivos se conserva el ingreso en la federación española y esuna muestra de lo usado entonces, el yugo y las flechas con el VivaFranco, Arriba España, como encabezamiento y la despedida con Dios,España y su Revolución Nacional sindicalista.
Ahora bien, los permisos federativos seconsiguieron bastante fácil, pero es de suponer que los gubernativosserían más difícil ya que entonces se necesitaba permiso de la policía para cualquier excursión, reunión o acto en el que se juntaran unas cuantas personas y los directivos eran puntualmente controlados.
¿Qué requisitos exigían en aquellos años, para dejar realizar una salida?
PABLO ESCUDERO: No recuerdo exactamente los pasos que tuvimos que dar en ese sentido. Lo que sí recuerdo es que cada vez que necesitaba un permiso, iba a la policía gubernativa que se encontraba en la parte superior del batzoki, y el encargado, que nos conocía como grupo constituído en el pueblo, nos daba sin dificultad el permiso, hasta que pasados unos años, en cierta ocasión al ir a hacer una solicitud habia otro en su puesto que no nos conocía y antes de darnos el permiso fue a comprobar los datos correspondientes a nuestro registro y aquí vino el revuelo al constatar que no estábamos legalizados, ya que no habíamos pasado por gobernación, y habíamos estado funcionando sólamente a nivel de amistades.
El resultado fue que me dieron no sé si 24 o 48 horas para legalizar nuestra situación, bajo amenaza de ir a parar a la cárcel. Luego ya todo se solucionó, aunque creo que ellos fueron los primeros interesados en no descubrir que nos habían estado dando permisos sin estar legalizados.
En aquella época se miraban con verdadero recelo las actividades de los grupos montañeros que les traían a la memoria aquellos mendigozales anteriores a la guerra afiliados al nacionalismo vasco. Y es que en estos 40 años de dictadura se han dado muchos casos de personas con inquietudes políticas que al tenerlas reprimidas las tenían que expresar a través de sociedades no políticas fueran de un tipo o de otro.
¿Había alguna intención política entre vosotros al fundar el grupo?
PABLO ESCUDERO: Entre nosotros la política estaba aparte. Lo que sí había era un sentimiento común de amor a todo lo nuestro, a Euskadi, a sus montes, pueblos, costumbres, etc. En esta línea puedes anotar que en los primeros años hasta se dieron clases de euskera. O sea que lo que sí había era un sentimiento abertzale, el 99 % de nosotros eramos abertzales, y así enseguida se diferenciaba en las concentraciones o excursiones a los falangistas que solían formar grupos muy reducidos aparte. De la unión de todos los abertzales de entonces debían de tomar ejemplo ahora.
Volviendo a las sociedades, ¿cuáles había entonces en Portugalete y cuáles en Vizcaya dedicadas al montañismo?
PABLO ESCUDERO: En Portugalete sólo había un club de fútbol, uno de remo, y en cuanto a montaña en Vizcaya estaban el Deportivo, Bilbao Alpino Club, Juventus y Artagan en Bilbao, así como el Centro Excursionista Vizcaino, Ganguren, Padura, Basconia, Tavira de Durango, Valmaseda... y en nuestra zona Arroletza, Turista de Barakaldo y San Pedro de Sestao. Lo que hay que dejar constancia es que nos convertimos enseguida en uno de los clubes punteros en la federación.
¿Podemos terminar con alguna anécdota de aquellos primeros años?
PABLO ESCUDERO: En el año 54 se celebró un campamento internacional en Picos de Europa con motivo de la inauguración del refugio de Urriello en honor del presidente de la Federación Española, Delgado Ubeda. La asistencia era bastante grande, más de setenta tiendas, aunque vascos quizás solo fueramos los cuatro de nuestra tienda. Al no acompañar el tiempo pasamos bastantes ratos en el refugio y como es costumbre entre nosotros con buen humor y entonando canciones nuestras, que eran escuchadas con atención por los allí presentes entre ellos Delgado Ubeda, Sopeña y demás autoridades y como no podía faltar en aquellos casos la guardia civil. Pues bien, Delgado Ubeda nos escuchaba emocionado, yo diría que casi se le saltaban las lágrimas, y cuando acabamos no pudo aguantar y nos gritó: Gora Euskadi! Mi mirada se dirigió significativamente a Sopeña...